La trayectoria de investigación del programa y sus avances

 

La creación del PROGLOCODE en 2005 estuvo precedida por una gran de cantidad de trabajos que en retrospectiva resultaron preparatorios del desarrollo de las problemáticas centrales del Programa y su relación con la economía mexicana. Continuando los trabajos sobre nuevas tecnologías y la reestructuración productiva de los años ochenta que habían llevado a cabo sobre todo Dabat y Rivera, y sobre la economía de México (Rivera) y la empresa mexicana (Basave), integrantes del Programa comenzaron a abordar en la década siguiente la problemática más general del cambio mundial desde una perspectiva histórica, de las nuevas corrientes de pensamiento vinculadas al conocimiento y de los cambios en la economía mexicana. En lo referente al cambio mundial y sus consecuencias sobre México, se desarrolló, en el CRIM de la UNAM, el Programa de Investigación “Cambio mundial e internacionalización desde la perspectiva mexicana”, dirigido por Dabat, y sus trabajos “El mundo y las naciones” y “Capitalismo mundial y capitalismos nacionales”. También se publicaron los diversos trabajos de Dabat y Rivera sobre las nuevas tecnologías y sobre las transformaciones de la economía mundial, y fue muy importante la aportación de Rivera sobre el desarrollo tardío de los países de Asia Oriental y, en conjunción con Dabat y Toledo, sobre la crisis asiática de fines de los años noventa. En este mismo  periodo Dabat y Toledo trabajan sobre la crisis mexicana de 1995, como también lo hacen Rivera y Toledo sobre la crisis y el periodo inmediato posterior, con aportación de Ordóñez sobre la vía de crecimiento en México.

 

Entrado el nuevo siglo, toma importancia el estudio de la globalización (Dabat) y de los ciclos largos y crisis históricas del capitalismo (Rodríguez Vargas), así como la profundización del estudio de la integración económica de México con Estados Unidos. En este sentido destacan la vinculación de Rivera y Dabat con la Universidad de California (Los Ángeles) y el PROFMEX coordinado por Wilkie, así como las vinculaciones con Gereffi y Vázquez Barquero, lo que dio un gran impulso a la investigación sobre cadenas productivas y desarrollo local. En este contexto tiene lugar el seminario internacional sobre Globalización, México y alternativas, en 1999, por parte del grupo de académicos que más adelante daría origen al PROGLOCODE, y que resultó en el libro “Globalización y alternativas incluyentes para el siglo XXI”. Adicionalmente es de resaltar la investigación histórica-estructural de Dabat y Ordóñez sobre la revolución informática, el sector electrónico-informático y la industria electrónica en México, que culminan en trabajos coordinado por Dabat, Rivera y Wilkie, otros de Dabat y Ordóñez, a los que se le agregan un conjunto de trabajos sobre México y América Latina como los estudios migratorios de Ana María Aragonés de la FES-Acatlán-IIEc, interindustriales y comerciales de Mónica Gambrill del CISAN o los trabajos sobre la economía y el pensamiento latinoamericano de Guerra Borges, Carmen del Valle e Ismael Núñez del IIEc

 

Subsiguientemente se profundiza el estudio de la revolución informática y el sector electrónico-informático (Dabat y Ordóñez), y da inicio el estudio de actividades específicas que conforman a éste, como la industria del software, tanto en términos teóricos de su importancia fundamental en la articulación del SC-E con el conjunto de la producción (Ordóñez), como en el  nivel histórico-espacial (trabajos de Mochi sobre la industria a nivel internacional, latinoamericano y en México), además de la significación histórica de las nuevas relaciones sociales, la gestión de los derechos de propiedad y las formas específicas de los procesos de innovación implícitas en el software abierto y libre, por oposición al software propietario (Ordóñez), así como la incidencia social del software abierto y libre (Mochi y Vélez), y la importancia crucial de la digitalización en los programas sociales (Vélez).

 

En el nivel teórico, el grupo fundacional del PROGLOCODE avanza simultáneamente en el estudio de las nuevas corrientes de pensamiento vinculadas al conocimiento, el cambio tecnológico, el aprendizaje, la relación ciencia-industria e innovación-sociedad, así como el papel de la política y las instituciones en el desarrollo histórico, o a las características de la economía del conocimiento y el nuevo capitalismo, donde destacan las contribuciones de Rivera, Ordóñez, Almanza y Dabat en diferentes aspectos. En lo que se refiere al estudio y reconocimiento de las aportaciones de las nuevas corrientes vinculadas a la innovación, como el evolucionismo y el neoschumpeterianismo, destaca el impulso dado por Rivera a una tarea ampliamente compartida por todos los integrantes del Programa. En cuanto al estudio de la economía del conocimiento y el carácter del nuevo capitalismo, resaltan las aportaciones de Ordóñez, Rodríguez Vargas y Dabat, aunque con distintos énfasis en las relaciones entre los aspectos cognitivos e informacionales: mientras Ordóñez lo hace en los aspectos cognitivos del nuevo capitalismo y en el papel central de la política, a partir de lo cual recupera la aportación del pensamiento gramsciano como factor explicativo de las vías de desarrollo; Dabat se centra en los aspectos tecnológicos, informacionales y globales del nuevo capitalismo, la cuestión de las vías alternativas de desarrollo, también, y, en conjunción con Rodríguez Vargas, en la problemática del ciclo y la crisis.

 

En relación con este última problemática, un antecedente muy  importante lo constituyó el proyecto internacional franco-mexicano sobre el nuevo capitalismo y sus elementos cognitivos, entre el proyecto MATISSE de la Universidad de Paris 1 y el grupo de académicos de la UNAM que posteriormente fundaría el PROGLOCODE; proyecto conjunto que contaría con la destacada participación de Moulier-Boutang.

 

Paralelamente, adquiere mayor importancia el estudio de los cambios en la modalidad predominante de la empresa trasnacional y la nueva división interindustrial del trabajo (Ordóñez, Dabat), de la internacionalización de la empresa mexicana (Basave) o del estudio de casos específicos relevantes (tesis de maestría sobre el Grupo Carso de Mario Humberto Hernández López). Se avanza también en la implementación práctica de la innovación tecnológica en términos de la discusión de las relaciones ciencia-industria, promovida por Silvia Almanza (CCADET-UNAM), que posteriormente llevaría a proyectos comunes del PROGLOCODE con ese centro de tecnología aplicada, así como a investigaciones sobre la tecnología digital (Ingeniero Vélez) y de la salud pública (Dra. Rivas) bajo la dirección, en este último caso, de Rivera. 

 

Asimismo, pasa a tener gran importancia la discusión sobre el ascenso internacional de la economía china, sus modalidades económicas propias y su trascendencia mundial (Dabat, Zhong Xiwei, Alberto Morales, Orquídea Melo), sobre las redes productivas internacionales (colaboración con Ma. de los Ángeles Pozas del COLMEX), las sobreganancias internacionales (Dabat, Rivera y Sztulwark) y la crisis mundial reciente (trabajos de Dabat, Rodríguez Vargas y Ordóñez, individuales o coautorales), el papel del Estado en el desarrollo económico (trabajos de Dabat y Rivera), sobre el desarrollo económico de América Latina a partir de la segunda posguerra (Dabat), y la incorporación reciente de la región en el nuevo patrón industrial, particularmente en los procesos de relocalización-subcontratación internacionales de servicios intensivos en conocimiento y de base electrónica-informática (Ordóñez), y, finalmente, sobre la industria de servicios de telecomunicaciones al nivel mundial y en México, y su papel específico en la economía y la división internacional del trabajo basadas en el conocimiento (Buchain y Ordoñez).

 

 En el periodo reciente se profundiza y complejiza el estudio de la problemática teórica y la discusión sobre las condiciones internacionales, con una participación creciente de investigadores nacionales y extranjeros de otras instituciones y estudiantes de posgrado. Los nuevos temas de estudio y discusión pueden sintetizarse en cinco tipos de problemáticas paralelas que no habían sido más que parcialmente abordadas con anterioridad, a saber a) las relaciones entre tecnología, producción, sociedad, instituciones, territorio y estado; b) las relaciones entre el capital productivo-innovativo y el capital financiero-especulativo, c) el agotamiento y crisis del neoliberalismo y las perspectivas de la economía del conocimiento; d) las condiciones determinantes de la diferenciación de las experiencias de reestructuración e integración de los países emergentes en “exitosas” y “retardatarias”; y e) los primeros esfuerzos críticos a fondo de aspectos centrales de corrientes como el evolucionismo, institucionalismo o la introducción de la problemática de los sistemas complejos en las ciencias sociales.

 

La introducción de la problemática de las instituciones y de la discusión sobre el pensamiento de Hodgson, es planteada sobre todo por Rivera y colaboradores externos del Programa como Arturo Lara y Bruno Gandlgruber, ambos de la UAM. El tema de la dimensión espacial de las relaciones sociales y el territorio, ha dido impulsado últimamente por Mochi en México, y por Ramiro Fernández y el Instituto de Investigación Estado, Territorio y Economía (IETE) de la Universidad Nacional del Litoral, Sta. Fe, Argentina.

 

 En lo referente al agotamiento del neoliberalismo y el papel del capital financiero especulativo, existe una amplia preocupación, en la que resulta fundamental la aportación de Oscar Ugarteche del IIEc. Por su parte, en las contribuciones a una visión crítica de aspectos centrales del evolucionismo, el institucionalismo o de la economía del conocimiento, cabe mencionar a la tesis de maestría de Alberto Morales en la UAM Xochimilco, el trabajo sobre la crisis internacional y de Estados Unidos de Dabat o las aportaciones sobre la polémica marxismo-institucionalismo desde la perspectiva gramsciana de Ordóñez. En relación con los sistemas complejos resalta la aportación de colaboradores externos como Yoguel (UNGS-Argentina) y Arturo Lara (UAM-X), junto con miembros del Programa como Silvia Almanza.

 

En el marco de la reorganización actual del PROGLODE (fines de 2010 y comienzos de 2001), se retoma el estudio de la economía de América Latina, con el apoyo de los trabajos de Ugarteche del IIEc, particularmente América del Sur, los estudios sobre Brasil (Irma Portos del IIEC) y las ya referidas publicaciones de Dabat sobre el desarrollo histórico de la región desde la posguerra y de Ordóñez sobre la integración reciente de la región en los procesos de relocalización-subcontratación internacionales de servicios intensivos en conocimiento y de base electrónica-informática. A estas preocupaciones generales se agregan el fuerte impulso que da Irma Portos a la inclusión del estudio de los medios de comunicación de masas y el de Marissa Reyes, de la UACM, al de las industrias culturales.

 

Las actividades de fundación del PROGLOCODE coinciden de hecho con la ampliación de las redes de relaciones del Programa tanto a nivel internacional como nacional. Se establecen relaciones con centros de investigación, como el Instituto de Industria de la Universidad Nacional de General Sarmiento, Argentina, con la Dra. Zhong Xiwei de la University of Science & Technology de Huazhong, China, que realiza una estancia postdoctoral en el IIEc, y se lleva a cabo el Seminario Internacional “Globalización, Conocimiento y Desarrollo” en el Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM en 2006, precedido por varios talleres de discusión que cuentan con una amplia  participación de investigadores nacionales y extranjeros.
 

CONCLUSIONES GENERALES

 

Las principales conclusiones que se derivan de este proceso de investigación y discusión de largo plazo son las siguientes: 

a) La economía y la sociedad mundial han entrado en una nueva fase de desarrollo histórico (el capitalismo del conocimiento o informático), traducida en una nueva configuración espacial del mundo o globalización, desplegada a partir de los años ochenta del siglo anterior, bajo la hegemonía mundial de los Estados Unidos y de la institucionalidad y las políticas neoliberales.

 b) Lo anterior dio lugar a una nueva división internacional del trabajo  basada crecientemente en el conocimiento y las diversas modalidades del aprendizaje, de carácter extremadamente dinámica, en la que los países en desarrollo que supieron impulsar robustos procesos de aprendizaje tecnológico masivo, impulsados por estados nacionales fuertes como China (cabeza de este proceso), tendieron a jugar un papel cada vez mas protagónico dentro de la economía y el orden mundial, a expensas de la declinación relativa de la principal potencia económica, tecnológica y financiera del mundo (Estados Unidos) y las viejas economías desarrolladas dominadas por el nuevo capital financiero.

c) En México tuvo lugar un cambio muy importante en su inserción internacional, expresado tanto en un gran crecimiento de industrias exportadoras de productos alta tecnología (aunque bajo una modalidad totalmente dependientes del capital y la tecnología extranjera), como  en el debilitamiento de su capacidad competitiva como país, resultado del debilitamiento de su estado nacional, de su incapacidad de innovación y aprendizaje tecnológico interno, de la acentuación de sus desigualdades sociales y regionales y de los enormes costos de su consiguiente descomposición socio-cultural.

d) En el nuevo siglo las tendencias anteriormente señaladas tendieron a acentuarse, lo que culminó en la crisis internacional iniciada en 2007-2008 con las consecuencias conocidas, que afectaron muy particularmente a México por su modalidad neoliberal de desarrollo, su débil base tecnológica propia, el carácter fuertemente monopolista de sus principales empresas y su enorme dependencia de la economía estadounidense en crisis.

e) No obstante lo anterior, las condiciones internacionales señaladas hacen posible el relanzamiento del desarrollo en México, en la medida en que el país abandone sus políticas públicas pasivas, fortalezca su estado nacional, adopte políticas sociales y culturales incluyentes y redefina su tipo de inserción en un sentido más adecuado a los cambios en el orden mundial y a las experiencias internacionales exitosas de desarrollo económico.

f) La enorme complejidad de la situación internacional, latinoamericana y mexicana, impone la necesidad de un gran esfuerzo teórico, metodológico y de comprensión histórica, para posibilitar la reorientación del pensamiento económico y político en el sentido señalado en el inciso anterior. Esto resulta fundamental para avanzar en el objetivo principal de coadyuvar a la formulación de nuevas estrategias de desarrollo para México y América Latina, que recojan lo mejor de la experiencia histórica de los países en desarrollo exitosos en promover un desarrollo tecno-productivo propio, pero combinándola con la preocupación de articularla con procesos de inclusión social, sustentabilidad ambiental y aportaciones significativas a la reorganización imprescindible del orden mundial en un sentido democrático y plural, acorde con las necesidades tecnológicas, sociales, ambientales e institucionales de nuestra época.